Empieza una historia de éxito
Después de atesorar una amplia experiencia como supervisor de departamento en el Instituto Kaiser Wilhelm para Investigación de Metal en Eningen (1944–1946), tres años en el Instituto de Investigación francés ONERA en Toulouse y 16 años como jefe de departamento en Dr. Förster (1949–1965), Richard Vallon fundó en 1965 los «Talleres Electromagnéticos» (en siglas EMW) y sienta las bases para la compañía VALLON. Ya en sus comienzos, quedó patente la enorme capacidad innovadora y la potente orientación al cliente. Estas cualidades recorren como un hilo conductor toda la historia empresarial hasta nuestros días: si existe un problema específico de aplicación o una solicitud especial, VALLON hallará la solución adecuada con un producto práctico y cualitativamente de gran calidad.
Las primeras actividades empresariales se llevan a cabo en el sótano de la vivienda de Eningen: aquí es donde Richard Vallon, contando ya con la ayuda de su hijo Gerhard, reforma los desfasados detectores de otros fabricantes. En esa época prácticamente no se podían conseguir baterías secas y se tuvieron que buscar soluciones para la alimentación eléctrica.
Poco después de la constitución de la empresa, esta se traslada a Reutlingen. En esa sede empresarial con una superficie de 250 m² trabajan tres personas.
En 1966 se suministran y venden los detectores modernizados en grandes cantidades: Los equipos de otros fabricantes técnicamente mejorados se vendieron luego como VALLON ML 1100 y EL 1200. La desfasada tecnología de tubos se sustituye por la nueva técnica de transistores. La alimentación eléctrica se efectúa entonces con pilas D.
